
no se sienten culpables de
los fracasos del Gobierno
que han votado.
Alberto Moravia
a) Nunca he disfrutado de ninguna subvención.
b) " Los trabajos", siempre me los he buscado yo.
c) Me voy a morir sin haber cortado una carretera, ya que nunca he trabajado en una empresa del Estado.
d) No soy embajador gallego en Paris, porque no tengo un hermano en un "partido nacionalista".
e) Nunca le hecho la ola a nadie, y mucho menos le he dado la espalda, mirando pa Cuenca.
ES DECIR, SOY UN ESPAÑOL DE A PIE CON DOS PRINCIPIOS INAMOVIBLES:
1) NO CREO EN LOS POLITICOS.
2) NO CREO EN LA JUSTICIA.
curioso demaciado curioso
ResponderEliminarBesos!
Tienes razón Pequeñita, curioso pero real.
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ResponderEliminarClaro, nunca los votantes se sienten culpables de nada ni aunque eligieran a Adolf con sus votos.
ResponderEliminarLos humanos tenemos, por nuestra seguridad mental -nuestro equilibrio, más bien- toda una serie de válvulas de escape que procuran desviar nuestra atención de aquello que más podría ofendernos.
ResponderEliminarSaludos cordiales, Mamuma.
Esa es la verdad Javier, así nos luce el pelo.
ResponderEliminarTío Chinto, vaya no sabía yo lo de las válvulas de escape.
ResponderEliminarTiene razón el Moravia, yo algunos que conozco seguro que volverán a votar al PCHOE:
ResponderEliminarSi gana el PP, que Hacienda les ponga un impuesto por reincidentes.
ResponderEliminarSí lo que dice Tío Chinto, los que votaron dos veces ¿ Cuántas válvulas de escape tienen?
ResponderEliminarEn este país, le han votado dos veces, y no te extrañe que le voten otra vez más.
ResponderEliminarMasoquismo puro y duro
ResponderEliminarHombre, yo distinguiría dos votantes, los que votan por primera vez, y los que se dejan engañar una segunda vez.
ResponderEliminarUn abrazo Mamuma.
Es que no conocen eso que se llama relación causa-efecto. También hay muchos que desconocen que se piensa con el cerebro, no con las vísceras abdominales.
ResponderEliminar:)
Hay dos cuestiones, me parece a mí, primero que el ser humano tiene una tendencia natural a no hacerse cargo de sus propios errores y no considera la cadena de causa y efecto de sus actos...
ResponderEliminarY segundo, no hay una información clara y concisa de lo que ocurre una vez que uno ha emitido su elección, sobre todo para los más jóvenes...
Y Moravia es un grande...
Beso
Yo tambiën estoy seguro Felipe, no hay dos sin tres.
ResponderEliminarNo es mala ida Morenito.
ResponderEliminarPolito, esos deben de tener como mínimo 10.
ResponderEliminarYo ya estoy curado de espanto Piqui.
ResponderEliminarElevado al cubo, Periquín.
ResponderEliminarElena, estamos de acuerdo y a esos me refiero.
ResponderEliminarHuy ,Candela si pensasen con el cerebro, otro gallo nos cantaría.
ResponderEliminarPara tener sentimiento de culpa hay que tener dos cosas: cerebro y conciencia.
ResponderEliminarY como ninguna de las dos cosas se puede robar, pues por eso los sociatas no pueden tenerlas.
Es una paradoja ciertamente. Imagino que sera por lo mismo que los votados jamás reconocen un error en su gestión: La culpa siempre es de otro... Así el votante (por mucho que en su interior lo sepa) no reconoce que se ha equivocado y mucho menos si es un simpatizante o un fanático. La culpa es siempre de otros... Y si mirais muchas de las respuestas que nos dan en los blogs se comprueba fácilmente.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo pero yo añadiría vergüenza.
ResponderEliminarBienvenido.
Es decir un sectario, Lobo.
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